A Message from Bishop James A. Tamayo

to the Faithful of the Diocese of Laredo

 

We are the Body of Christ. The Risen Christ is our Head, and we are the members. Christ does not abandon us during times of suffering. He draws us closer to Himself. I greet you with these words of faith, hope and love. During this time of the Coronavirus pandemic, it is reassuring to know that we are not alone. The Risen Christ, the conqueror and healer of all ills, is with us.  

 

As Bishop of the Diocese of Laredo, I have kept each one of you close to my heart remembering you in my daily prayers. Above all, I seek for every one of you a deeper relationship with our Risen Lord. He is our Good Shepherd who brings us everlasting peace.

 

I am most grateful to all of the pastors of our parishes who by means of livestreaming Sunday Mass bring the presence of Christ to the domestic church – your family at home. A listing of churches in the diocese who are livestreaming Masses is available on the Diocesan website and Facebook page. Please continue to be spiritually nourished through the livestreaming of Masses, acts of spiritual communion, and continued time spent with our Lord in prayer.

 

I am informed of the latest directives from the federal government, the Centers for Disease and Prevention Control (CDC), Governor Abbott's office, and local officials throughout the Diocese of Laredo. As the State of Texas attempts to prudently and cautiously reopen businesses, I am prayerfully considering how and when we might safely open churches throughout the Diocese of Laredo once again.

 

On April 29, 2020, I consulted with the Presbyteral Council, which consists of 15 priests of the Diocese of Laredo through a virtual meeting regarding the preparations necessary to resume the celebration of Sunday Mass at our parishes. We discussed a number of vital and essential factors which we are taking into account. We are obligated to consider the health and well-being of all in our community; and of special concern are people over 65 years of age, children, and persons with underlying health conditions.

 

As I continue to consult our parish priests on this matter and we make the necessary preparations, I ask for your patience, cooperation and prayers. I assure you, as your Bishop, I desire that our public Masses resume; but this needs to happen in an orderly and prudent manner to prevent the spread of COVID-19.

 

Until we are ready to resume public Mass at the parishes, the dispensation from the obligation to attend Sunday Mass is still in effect. Therefore, the opportunity to livestream Mass and pray in your domestic church – your family at home – under these circumstances, is the best opportunity for us to be united with God and one another.

 

 

Most Reverend James A. Tamayo, D.D.

Bishop

 

 

 

Mensaje de parte de Monseñor Jaime A. Tamayo

a los Fieles de la Diócesis de Laredo

 

Somos el Cuerpo de Cristo. Cristo resucitado es nuestra cabeza y nosotros somos los miembros. Cristo no nos abandona en tiempos de sufrimiento. Nos acerca más a sí mismo. Los saludo con estas palabras de fe, esperanza y amor. Durante este tiempo de la pandemia de coronavirus, es alentador saber que no estamos solos. Cristo resucitado, el vencedor y sanador de todo mal, está con nosotros.

Como obispo de la Diócesis de Laredo, he mantenido a cada uno de ustedes cerca de mi corazón recordándolos en mis oraciones diarias. Sobre todo, busco para cada uno de ustedes una relación más profunda con nuestro Señor resucitado. Él es nuestro buen pastor quien nos trae la paz eterna.

Estoy muy agradecido con todos los pastores de nuestras parroquias quienes por medio de la transmisión en vivo de la Misa dominical llevan la presencia de Cristo a la iglesia doméstica, su familia en casa. Una lista de parroquias en la diócesis que están transmitiendo Misas en vivo está disponible en el sitio web y la página de Facebook de la Diócesis de Laredo. Por favor, continúen alimentándose espiritualmente a través de la transmisión en vivo de la Misa, actos de comunión espiritual y pasando tiempo con nuestro Señor en oración.

 

Estoy informado de las últimas directivas del gobierno federal, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades  (CDC), la oficina del Gobernador Abbott y de los funcionarios locales en toda la Diócesis de Laredo. A medida que el Estado de Texas propone reabrir negocios con prudencia y cautela; estoy considerando en oración cómo y cuándo podríamos abrir iglesias de manera segura en toda la Diócesis de Laredo.

El 29 de abril del 2020, consulté a través de una reunión virtual con el Consejo Presbiteral, que consiste de 15 sacerdotes de la Diócesis de Laredo sobre los preparativos necesarios para reanudar la celebración de la Misa dominical en nuestras parroquias. Discutimos una serie de factores que consideramos vitales y esenciales.  Estamos obligados a considerar la salud y el bienestar de todos en nuestra comunidad; y de especial preocupación son las personas mayores de 65 años, los niños y las personas con problemas de salud subyacentes.

 

Mientras continúo consultando con  nuestros párrocos sobre este asunto y hacemos los preparativos necesarios, les pido su paciencia, cooperación y oración. Les aseguro, como su Obispo, que deseo que nuestras Misas públicas se reanuden; pero esto debe suceder de manera ordenada y prudente para evitar la propagación de COVID-19.

 

Hasta que estemos listos para reanudar la Santa Misa en las parroquias, la dispensa de la obligación de asistir a la Misa dominical sigue vigente. Por lo tanto, la oportunidad de transmitir Misa en vivo y orar en su iglesia doméstica, en estas circunstancias es la mejor oportunidad para unirnos con Dios y entre nosotros.

 

+Jaime A. Tamayo, D.D.

Obispo